60 Aniversario de MINI: momentos exclusivos de la vida de un icono del estilo
John Lennon condujo uno, Peter Sellers circuló rugiendo en uno en sus comedias de detective, e incluso la Reina Isabel de Inglaterra se dejó pasear en uno por el parque de Windsor Castle. Innumerables celebridades sucumbieron al encanto del classic Mini, presentado al público por primera vez hace 60 años. El diseño distintivo del coche, la sorprendente amplitud de espacio y las características de conducción ágil fueron factores decisivos que contribuyeron a que este vehículo pequeño y revolucionario fuera aceptado en los círculos de la alta sociedad en una fase temprana, especialmente en su país de origen: Gran Bretaña. Las exclusivas fotografías muestran a numerosas estrellas del mundo de la música, el cine y la moda que eligieron el classic Mini como su medio de transporte preferido, convirtiéndolo en un icono de su tiempo.
Además, para dar un mayor realce al 60 aniversario de la marca, MINI conmemora esos gloriosos primeros años con algunos vehículos especiales y excepcionales. Tras el exitoso lanzamiento al mercado del MINI Edición 60 Aniversario para los actuales MINI de 3 puertas y MINI de 5 puertas, el classic Mini volverá a colocarse en primera línea. El exclusivo y refinado modelo único con el diseño de franjas de colores de la actual Colección MINI 60 Years Lifestyle revive la moda y el estilo de vida de los libres años sesenta.
Tras el relanzamiento de la marca en 2001, no pasó mucho tiempo antes de que las celebridades de todo el mundo pudieran disfrutar del inconfundible placer de conducir un MINI moderno, que seguía firmemente los pasos de su clásico predecesor. Como primer vehículo compacto del segmento de gama alta, el MINI se convirtió de inmediato en un creador de tendencia. Su concepto poco convencional ha inspirado a cineastas, músicos, diseñadores de moda y otros artistas por igual. Gracias a su enorme popularidad, a una clara inclinación hacia la extravagancia y la diversión que supone ponerse a sus mandos, el MINI ha sido protagonista de varias películas de Hollywood y se puede encontrar aparcado en los garajes privados de numerosas estrellas del espectáculo.
Lord Snowdon presentó el classic Mini a la familia real.
El hecho de que el classic Mini fuera aceptado en la sociedad de Londres desde sus inicios fue propiciado por un miembro de la Familia Real: Lord Snowdon (fotógrafo, diseñador, amigo del diseñador del Mini Alec Issigonis y esposo de la princesa Margarita) fue uno de los primeros en comprar el novedoso y pequeño vehículo. En una fotografía familiar tomada en 1965, se le puede ver con la princesa Margarita y su hijo David dando un paseo por Londres en un Mini.
Ya en 1960, Lord Snowdon abrió para el Mini las puertas de la residencia real durante un fin de semana: su cuñada, la reina Isabel, se sentó junto a Issigonis para dar una vuelta por el parque del Castillo de Windsor. Para el pequeño automóvil esto era algo así como ser nombrado caballero: el más alto de los honores reales, que el propio Issigonis recibió nueve años después.
Los Beatles, los Monkees, los Beach Boys, Spencer Davis, Mick Jagger, Eric Clapton y David Bowie: todos ellos consideraron al Mini como un gran éxito. En los años siguientes, el Mini se aseguró un lugar privilegiado en la escena de la moda, el arte y la música, que floreció en Londres en la década de los años sesenta, conocida como “Swinging London”. Su fama internacional se debió sobre todo al entusiasmo que generó entre todos los miembros de los Beatles. John Lennon compró un Mini en 1964, aunque aún no tenía permiso de conducir. Las fotografías históricas muestran al batería Ringo Starr con uno de los modelos Mini Cooper S que participaron en el Rally de Montecarlo de 1964 y a Paul McCartney en su Mini particular en 1967. El guitarrista George Harrison fue el orgulloso propietario de un Mini de Ville, perfeccionado por el célebre fabricante de carrocerías Radford. Cuando los Beatles se reunieron en 1967 para grabar su película para la televisión “Magical Mystery Tour” en el aeropuerto de West Malling, en Kent, John Lennon también disfrutó acelerando su Mini pintado con colores psicodélicos por las pistas del aeródromo.
El cariño de los músicos famosos por el classic Mini se prolongó durante décadas y no se limitó en modo alguno a las Islas Británicas. A medida que la popularidad del Mini se convertía en un fenómeno cada vez más global, las bandas de pop y rock de los EE.UU. ganaban nuevos fans en Europa. En 1966, fueron los Beach Boys quienes emprendieron una gira internacional con su sonido surfista y posaron frente a un Mini Moke en Gran Bretaña. Esta imagen de los músicos californianos en la que aparecía un coche de playa con el nombre de la banda se difundió por todo el mundo. Aproximadamente al mismo tiempo, la banda estadounidense Los Monkees alcanzó el punto álgido de su popularidad. En una fotografía que se remonta a este período, se puede ver al guitarrista y cantante Michael Nesmith fotografiando a su novia Phyllis, que miraba a la cámara a través del techo plegable de un Mini. Al igual que el Beatle Harrison, el miembro de Los Monkees Nesmith tenía su propio Mini Cooper S personal fabricado por Radford. Este extravagante y costoso ejemplar único no solo tenía un techo plegable, sino también un motor de 100 CV y un salpicadero de madera con instrumentos adicionales.
Además de disfrutar de la conducción del classic Mini, al músico londinense David Bowie le impresionó especialmente lo fácil que resultaba aparcarlo. Estaba convencido de que no había otro automóvil diseñado con tanta perfección para adaptarse a la vida urbana. Con motivo de la celebración del 40 aniversario del original, en 1999 Bowie diseñó un classic Mini que reflejaba todo lo que le rodeaba, como una tetera pulida hecha de plata británica. La cantante alemana Nina Hagen también fue fotografiada con un Mini Cooper para la revista Paris Match en la capital francesa en 1994.
Nacido para ser un héroe de acción: el classic Mini como estrella de cine de cuatro ruedas.
A veces como extra y en otras ocasiones como protagonista: el classic Mini ha aparecido en series de televisión y participado en películas a lo largo de seis décadas. Aparece en la película de culto de 1966 “Deseo de una mañana de verano”, así como en la cinta de suspense “Kaleidoscope” del mismo año, en la que un por entonces desconocido Warren Beatty protagonizaba el papel principal. La película “Yo soy el amor” protagonizada por Brigitte Bardot también data de 1966: en ella unas modelos viajan en un Mini Cooper. La estrecha relación de la estrella francesa Bardot con el coche británico en su vida privada también se demuestra en las fotografías tomadas en 1980, en las que se la puede ver acompañada de sus perros en un Mini Moke.
“La mujer biónica” fue una serie de televisión que gozó de una considerable popularidad tanto en Estados Unidos como en el Reino Unido. En 1976, la actriz líder Lindsay Wagner posó en Londres delante de un classic Mini suspendido sobre un soporte de acero, lo que daba la impresión de que la actriz estaba levantando el vehículo con una mano, haciendo creer que poseía poderes sobrehumanos como su personaje de la serie de televisión.
Las escenas en las que el classic Mini fue utilizado por el actor británico Peter Sellers y el director Blake Edwards eran igualmente poco convencionales y divertidas. Sellers y Edwards rodaron la película “El nuevo caso del inspector Clouseau” en 1964 como una secuela de la película de cine policíaco “La pantera rosa”. En su papel como Inspector Clouseau, Sellers conduce un Mini Cooper bastante inusual: aquí el actor reflejaba su inclinación por las extravagantes versiones especiales del classic Mini también fuera de la pantalla. El vehículo que aparece en la película es un Mini de Ville fabricado por Radford, con un diseño de pintura exterior que imitaba la forma de un cesto de mimbre en los costados de la carrocería. A lo largo de los años, Peter Sellers adquirió alrededor de una docena de vehículos classic Mini mejorados individualmente, incluido uno que le regaló a su entonces esposa Britt Ekland en el interior de una tarta de cumpleaños extragrande, y que le fue entregada en la oficina de ventas de Radford en Londres en 1965.
Probablemente el aspecto más espectacular del classic Mini en la gran pantalla fue en la comedia de gángsters de 1969 “The Italian Job”. En esta película, el delincuente Charlie Croker, interpretado por Michael Caine, se alía con un cómplice para planear el robo de lingotes de oro en el centro de Turín. Cargan su botín en tres Mini Coopers (pintados de rojo, azul y blanco) antes de emprender una impresionante persecución a través de los túneles de alcantarillado, sobre los tejados y sorteando escaleras en medio de la confusión del tráfico en la ciudad italiana. “The Italian Job” volvería a los cines 34 años después: en la nueva versión con las estrellas de Hollywood Charlize Theron, Jason Statham y Mark Wahlberg, la historia de un espectacular robo de oro volvió a proyectarse con un estilo más real y trepidante. A la hora de realizar el casting de los coches protagonistas, la elección se decantó, como no podría ser de otro modo, a favor del nuevo MINI Cooper S, que en esta ocasión hizo gala de su agilidad y estilo deportivo en las calles de Los Ángeles.
También en la carretera como parte del mundo de la moda.
En el Swinging London de la década de los años sesenta no solo surgieron nuevos sonidos musicales, sino también elegantes tendencias en el mundo de la moda, y el classic Mini siempre estuvo en el centro de la acción. Lesley Hornby, más conocida por su sobrenombre Twiggy, aprobó su examen de conducción en un classic Mini en 1968.
Mary Quant, influyente diseñadora de moda femenina e inventora de la minifalda, también se inspiró en el classic Mini. Poco después de obtener su permiso de conducir se compró un Mini negro y más tarde diseñó una edición especial que se distinguió, entre otras cosas, por la tapicería de los asientos de franjas blancas y negras. La diseñadora británica también se mostró encantada con el nuevo MINI: “Es un coche moderno, alegre y sonriente”.
A finales de la década de 1990, Paul Smith, uno de los diseñadores de moda masculina más famosos del Reino Unido, creó una serie especial limitada del classic Mini con un acabado de pintura azul creado por él mismo a juego con las llantas de aleación de color antracita. Otra edición única al menos igual de popular que esta se presentó en el 40 Aniversario del classic Mini, que Smith pintó con sus típicas franjas de colores.