Encuentro Lancista en Cuenca
18 vehículos se inscribieron en el evento entre los que hubo mayoría de Lancia Delta, con diferentes versiones, HF Turbo, Integrale 16 V y HF Integrale Evo II. También contamos con la asistencia de otros modelos como Lancia como Delta II, Thema, Kappa, Beta Coupé o los exclusivos Beta Montecarlo y Fulvia Sport “Zagato”. Igualmente se contó con la asistencia de dos socios del Club Clásicos Cuenca, con Porsche 911 y Alfa Romeo que quisieron unirse a la concentración. La mayoría de los inscritos llegaron el viernes 31 por la tarde al punto de reunión, el Hotel La Cueva de Fraile, situado en las proximidades de Cuenca en un entorno de gran belleza natural. El resto lo hizo a la mañana siguiente.
El día 1 comenzó la ruta temprano con un día claro y caluroso, viajando desde La Cueva del Fraile al barrio del Castillo por la ruta turística que sigue la hoz del río Huécar y posteriormente hasta la plaza mayor de Cuenca, donde se encuentra la Catedral y el Ayuntamiento. Primera parada para tomar fotos de los monumentos de Cuenca y, como no, de los vehículos participantes.
Continuando la ruta después desde Cuenca, bajando por la carretera de San Isidro para enlazar hacia Villalba de la Sierra y llegar a la segunda parada, el bonito pueblo de Huélamo, donde se sirvió un refrigerio.
Posteriormente seguimos hacia Valdemeca disfrutando de lo sinuoso de las carreteras de la sierra conquense, hasta la parada de la comida en el pueblo de Cañete.
Después de la comida, en la que se entregaron unos regalos típicos de la zona a todos los participantes, la caravana siguió ruta hacia Cañada del Hoyo, donde los participantes pudieron visitar el complejo kárstico situado cerca de esta localidad y constituido por siete lagunas que muestran diferentes colores al ojo humano debido a la presencia en ellas de diferentes microorganismos que producen este efecto.
De vuelta a La Cueva del Fraile. Cena conmemorativa y descanso.
El domingo día 2 se realizó una ruta, también por la serranía de Cuenca, que pasó de nuevo por Villalba de la Sierra para continuar por una entretenida carretera repleta de curvas hasta Las Majadas y descender después hasta la población de Uña para comer en esta localidad. Por la tarde visita al Ventano del Diablo, cueva natural con vistas a las hoces del Júcar. Una parada obligada para contemplar su impresionante paraje natural.
La visita al Ventano del Diablo puso fin a un magnífico Encuentro Lancista que seguro dejó muy buen sabor de boca a todos los asistentes.
Marta Auñón