XV Salón Autoclássico Oporto
El público respondió al gran nivel alcanzado por el XV Salón AutoClássico Porto como demuestra que en esta cita se hayan superado con creces los 35.000 visitantes previstos, como balance de los cuatro días en los que el recinto de Exponor se ha convertido en el centro de todas las miradas del mundo de los clásicos.
Gran feria la de Oporto con un notable ambiente y diversas figuras, pilotos y profesionales del sector, entremezclados con simples aficionados, que han disfrutado de contenidos muy variados.
Al tiempo, el Motorshow AutoClássico iba disparando la adrenalina de los asistentes pues se celebraban las sesiones 3ª y 4ª de competición, dejando para la tarde las finales y la Superfinal.
Como ha sido habitual en estos días, los stands con los homenajes a diferentes marcas y modelos centraron la atención del público, si bien la muestra de los Ferrari, donde también se celebraba el 30º aniversario del F40, con la exhibición del primer modelo que se vendió en Portugal hace 30 años, atrajo el mayor número de miradas.
Además, de esta joya, un Testarossa, un 330 GT, un 308, un F355, un 250 GT o un 250 GTE, entre otros, agolparon a un alto porcentaje del público para que la efeméride fuese recordada.
Otros stands para conmemorar hitos, como el del BMW Serie 7 por sus 40 años, el de la Lambretta, por sus 70 años, el de los 60 años del FIAT 500, los 90 años de Volvo o el espacio dedicado al MG C, por cumplir 50 años desde su presentación, han sido igualmente muy bien valorados.
Todo ello, junto a las concentraciones vividas, como las de Toyota Corolla (AE86), el primer día, y las de Ferrari, Porsche y Honda MX-5, el sábado, explican esa gran afluencia de público en esta edición de 2017, lo que a su vez ha repercutido en un destacado volumen de ventas, tanto en la zona de exposición como en la zona comercial de piezas, recambios, componentes y regalos.
Como colofón a la feria, en la jornada del domingo el tradicional Passeio de Clássicos Citroën-Filinto Mota fue el animador de la mañana, pues ya desde primera hora se empezaron a concentrar todo tipo de modelos clásicos de la marca francesa.
Hasta un centenar de coches se dieron cita en esta XV edición, para proceder a salir desde el recinto ferial y llenar las calles de Oporto de tan variada y divertida caravana.
Barbosa se lleva otra vez el Motorshow Autoclássico
Al tiempo, el Motorshow AutoClássico iba disparando la adrenalina de los asistentes pues se celebraban las sesiones 3ª y 4ª de competición, dejando para la tarde las finales y la Superfinal.
Al final victoria fue para Mário Barbosa, que parece mostrarse imbatible con su Citroën DS3 WRX, ya que es el tercer trofeo consecutivo que conquista, dejando el listón muy alto.
El invitado principal, y verdadero cabeza de cartel, el Campeón del WRC Hannu Mikkola, reservó para sí gran parte de los focos mediáticos. Con cierta humildad el piloto finlandés atendió todas las solicitudes de autógrafos, fotos, "selfies" y conversaciones de los aficionados.
El triple vencedor del Rally de Portugal, actualmente con unos respetables 75 años, no vino a competir solo a deleitar al público con una exhibición, pese a pilotar un Ford Escort MK II, modelo con el que obtuvo cuatro de los 18 triunfos que dejó registrados en el Campeonato del Mundo).
Para Mikkola, "fue muy divertido regresar a Portugal, 33 años después de haber vencido el Rally de Portugal. El país ha evolucionado increíblemente, pero la simpatía de las personas se mantiene y eso es lo mejor que se puede esperar. Guiar el Ford Escort también fue como viajar en la máquina del tiempo y revivir muchas de las emociones por las que pasé al volante de mi coche de rallys favorito. ¡Fueron cuatro días muy divertidos, para un joven de mi edad!
Nuevamente, este certamen se revela como la gran referencia en la península ibérica por su dimensión y por la pasión con la que los aficionados portugueses, junto a una notable presencia de españoles, acogen esta cita.