VI Rallye Coches Clásicos Solidarios
30 diciembre
Después de demostrar su alto nivel de compenetración durante toda la temporada 2017 con el Peugeot 205 GTI y en especial en la pasada Clásica Villa de Comillas en la que se impusieron en el apartado Libre siendo una de las sensaciones de la prueba, el equipo formado por Rodrigo Posada y Alberto Martínez se refrendó en el VI Rallye Coches Clásicos Solidarios logrando una sensacional victoria en su estreno con el Ford Fiesta XR2. Todo ello con el telón de fondo de una prueba perfectamente organizada por todo el equipo de la Escudería Scratch, en colaboración con el resto de clubes de la Copa de Escuderías, que resultó ser todo un éxito de participación, ambiente y desarrollo en general.
Los Corrales de Buelna albergaba por primera vez esta ya tradicional cita en la que todos los asiduos de la Copa de las Escuderías de Clásicos de Cantabria demuestran su faceta más solidaria. Y es que los derechos de inscripción se fijaron en 25 euros como mínimo por vehículo, siendo posible aportar más cantidad a criterio de los participantes. La cuantía recaudada tuvo como destino la Fundación Luchamos por la Vida. Además, cada equipo aportaba una bolsa con alimentos no perecederos, ropa o juguetes para las familias más necesitadas, siendo la Cruz Roja de Torrelavega la entidad encargada de la gestión.
Organización a gran altura
En cuanto al plano organizativo, los chicos de la Escudería Scratch, con José Ramón Campo a la cabeza, contaron con la inestimable ayuda de Crono a Cero, Ojeda Sport, Anube Sport, Protección Civil, Ayuntamiento de los Corrales y un sinfín de colaboradores para poder sacar la prueba adelante. También hubo mucho trabajo previo en cuanto a la difusión de todos los detalles del rallye y de los inscritos que poco a poco iban entrando a través de las redes sociales, lo que propició un importante efecto llamada que se tradujo en más de 70 equipos hasta llegar al tope logístico establecido por la organización.
Ya el mismo sábado del evento, la buena climatología y la agradable temperatura rompió la tónica de los días invernales previos, lo que animó mucho más el ambiente con afluencia de un mayor número de vecinos y público en general en la víspera de Nochevieja. A las 16 horas y tras el correspondiente briefing, el primer equipo tomaba la salida para disfrutar de los seis tramos de regularidad diseñados para la ocasión. Cabe destacar que pese a tratarse de una cita solidaria, el nivel de dificultad en cuando a navegación no fue del todo sencillo, por lo que la emoción estuvo siempre servida tanto para los más experimentados como para aquellos que debutaban o contaban con sus parejas o amigos en el asiento derecho.
Un primer tramo urbano por los aledaños de los Corrales y del polígono industrial de San Felices de Buelna daba paso a zonas como Lobao, Collado de Cieza, Valdeiguña, Molledo, Arenas de Iguña, Castillo Pedroso, Borleña de Toranzo, Pando, Aes o Hijas entre muchas otras, para llegar de vuelta a los Corrales, ya con la noche como compañera, alrededor de las 19:00 horas. Aunque en la misma jornada se disputaba en Amorebieta otra cita solidaria de regularidad y en Colindres tuvo lugar la Concentración Navideña de Clásicos, el nivel del evento en cuanto a participación fue espectacular y las clasificaciones como siempre estuvieron de lo más reñidas.
Vencedores por categorías
Tras un total de 49 controles secretos computados en todo el recorrido, la pareja formada por Rodrigo Posada y Alberto Martínez lograban una trabajada victoria con 29 puntos, estrenando del mejor modo posible el Ford Fiesta XR2 recientemente adquirido a Eneko Conde. La segunda posición, con tan sólo un punto de penalización más en su casillero, la conquistaban Ricardo González y José Manuel Salas, emblemático equipo que sacaba el Talbot Samba Rallye al ruedo para la ocasión. Por su parte, el vigente campeón de la Copa de Escuderías Carlos Díaz concluyó tercero, recuperando a Leandro Morante como copiloto y sumando 32 puntos con su inseparable BMW 318i E21. Félix Colina junto a Rosa Carmen Huertos (Ford Escort MK II) y José María Fuentevilla con Carlos Gabriel Valdés (Volkswagen Polo GT Coupe) completaban las cinco primeras plazas tanto de la general como de la categoría “Con Instrumentos”.
En cuanto a la categoría reservada a los equipos sin instrumentación adicional, similar a la Open de las citas puntuables para la Copa de Escuderías, la dupla formada por Víctor Álvaro y Rubén Álvarez fueron los mejores con un Volkswagen Golf Gti Mk2 de 1990. Segundos acababan Sergio Pérez y Mario González empleando el Renault 4L del Laberinto de Villapresente, mientras que Manuel y Lara Herrero completaban el cuadro de honor sobre el Renault 5 TS.
Pedro Cañizo
