En Memoria de Julio Santamaría
En su recuerdo, en torno a una treintena de clásicos salieron desde la sede del club alavés y recorrieron a través de la A-1 los 36 km de distancia hasta la localidad de Rivabellosa, en la que aparcaron sus vehículos junto al edificio del Ayuntamiento de Ribera Baja.
Tras un almuerzo acompañados por la familia y personas cercanas a Julio Santamaría, regalaron a Marta –la esposa de Julio- un bello y multicolor ramo de flores, más un cuadro ilustrado con una fotografía ampliada, obra del fotógrafo Unai Ona. En la imagen se puede contemplar a Julio al volante de su amado Ford Mustang Fastback rojo de 1965, en un contraluz ciertamente atractivo.
En definitiva, una reunión repleta de cariño y emotividad, en homenaje a una persona excelente y gran entusiasta del Ford Mustang.
Ignacio Sáenz de Cámara