Ruta alrededor del pantano de Sau con los micros del Clàssic
La salida arrancó sobre las 10.15 h desde el restaurante El Roser de Calldetenes, una vez descargados los micros y tras un buen desayuno de tenedor. El teniente de alcalde de Cultura de Calldetenes, como va siendo habitual, dio el disparo de salida. Durante el recorrido pasamos por los pueblos de Folgueroles, Roda de Ter y Santa Maria de Corcó y desde este lugar seguimos la preciosa carretera que lleva a Tavertet, estrecha y llena de curvas.
En el bonito pueblo de Tavertet nos esperaban los amigos Dionisio Selga, Toni Novellas y Ramon Espadaler "los del DARP" como ellos se llaman. Comentar que estos señores restauran coches antiguos y clásicos desde hace muchos años. Cuentan con una colección envidiable y digna de ser vista.
El señor Espadaler nos hizo de guía por el camino que bordea los escarpados riscos hasta el castillo. Las vistas son espectaculares: el pantano de Sau al fondo y alrededor, montañas. Paseamos por el pueblo y después cogimos el camino dirección a Rupit pasando por los preciosos prados de pasto y bosques de hayas y robles.
En el pueblo de Rupit se hizo una parada logística de 15 minutos. Regresamos a la ruta por el camino de Sant Joan de Fàbregues que baja desde el acantilado hasta el embalse del pantano de Sau. En este lugar, destino de la excursión, la parada y las fotografías de rigor. Este año, del pueblo sumergido, sólo vimos la punta del campanario de la iglesia.
Para acabar la ruta pasamos por la presa del pantano y Vilanova de Sau y a las 15 h llegamos a Calldetenes. En el restaurante El Roser nos sirvieron, como cada año, una buena comida típica de nuestra tierra. Después, "un clásico", el sorteo de una manta de coche, detalle de Carpinteria i Matalasseria Rovira, obsequio a todos los asistentes (por vehículo) de un fuet, gentileza de Carnicería Saborit (ambos comercios de Calldetenes).
El día transcurrió sin incidentes ni averías de los vehículos participantes. En total un recorrido importante, 95 km. Los micros resistieron los tramos de baches muy pronunciados y rellenos de piedras. ¡No cayó ningún tornillo! esto quiere decir que "los llevábamos bien pillados", y muy importante, fue un día de sol fantástico para los coches descapotables.
Se agradece la gentileza y colaboración también del Ayuntamiento de Calldetenes. Hasta el año que viene.
Texto y fotos: Joan Bardolet / CMCB