Retro Car Club Ronçana, octava Motorada Clàssica
El 12/05/2024 segundo domingo de mayo, como viene siendo costumbre, el Retro Car Club Ronçana organizó la octava "Motorada Clàssica" en la plaza Once de Setembre de Santa Eulàlia de Ronçana, con algunos cambios respecto a años anteriores.
Desde las seis de la mañana los organizadores estábamos con ilusión y motivación montando carpas, alineando mesas, poniendo sillas, e instalando equipos. Intentando hacerlo lo mejor que nos fuera posible para disfrutar de un gran evento. Los asistentes más madrugadores ya estaban allí antes de las ocho. Ya se podía ver que iba a ser un gran día: Justo a la hora marcada en la previsión, empezó a verse una constante afluencia de asistentes, sin ser tan masiva como para colapsar la entrada, pero constante.
Hasta llegar a los más de 80 inscritos no cesó el constante goteo de motos. A cuál más bonita.
Algunos solos otros acompañados, unos en solitario otros en grupo. Muchas caras ya conocidas de otros años, pero más aún personas que nos descubrían por primera vez. Eso sí, todos luciendo con orgullo sus amadas máquinas.
Una vez aparcados se iban acercando a la carpa de inscripciones con su correspondiente inscripción a formalizarla, donde se les daba el "pack de bienvenida" en el que había el dorsal conmemorativo, los tiquets para el almuerzo, el cupón para votar a la moto que más les gustase de todas, el boleto para el sorteo, un flyer del evento, y un original llavero realizado a mano con una bujía real.
Siempre ambientado con buena música, empezamos con el almuerzo, donde había a elegir entre tres platos (capipota, butifarra con judías o albóndigas con sepia) acompañado de unas olivas, pan, unas galletas de mantequilla, y la bebida al gusto. Tuvo muy buena aceptación por los comensales que fueron más de ciento diez en total. ¡Hasta llegaron a felicitarnos!
Una vez con el estómago lleno, dimos paso a la ponencia de Josep María Simó sobre la desaparecida marca MV Agusta. Su historia, sus logros en competición, sus modelos más populares, mantuvieron al público muy interesado ya que muchos éramos desconocedores de muchos datos. Con la colaboración en la ponencia de Antonio Crivillé piloto y hermano del campeón del mundo, que nos contó la historia de su preciosa Alpha 350 del año 1945, la cual se llevó el premio a la moto más antigua.
Concluida la ponencia, anunciamos y dimos paso a la ruta en carretera de 37 km, por carreteras de montaña disfrutando de las vistas únicas de nuestro Vallès Oriental. Un verdadero deleite para la vista de los amantes de las dos ruedas ver pasar más de 50 motos, todas clásicas, en fila una detrás de otra, y terminando en un vehículo arrastrando el remolque de nuestro club a modo de asistencia. La gente que estaba en las calles por las que íbamos pasando, se sorprendían y acercaban para poder apreciarlas más de cerca, llegando a aplaudir a nuestro paso en algún punto. Llegar a Gallifa, parar para estirar las piernas y volver a nuestro pueblo, una ruta corta pero equilibrada teniendo en cuenta la gran variedad de motos participantes.
Ya de nuevo todos en la plaza, procedimos a la acostumbrada entrega de premios, a la moto más antigua, el piloto que ha venido de más lejos, a la más votada por los asistentes, y a la considerada por la organización con más interés o valor histórico. Un trofeo único, personalizado y diseñado para la ocasión, realizado a mano reutilizando piezas de motos en desuso.
Después del sorteo de varios regalos, dimos por finalizado el evento dando gracias a los organizadores, colaboradores, conferenciantes, y evidentemente a todos los asistentes.
Ha sido un gran evento, que sin ser de los más multitudinarios, y con algunos detalles por pulir, nos ha dejado un gran sabor de boca, y con un sentimiento de satisfacción por el trabajo y esfuerzo realizados.
¡El año que viene más y mejor!!!
Albert Alaball Perera - Tresorer del RCCR