Valladolid acogió la primera concentración de sidecares de España
11-12-13 octubre, Valladolid
Estos vehículos de tres ruedas invitaron a echar la vista atrás en el tiempo a los ciudadanos y visitantes de la ciudad, que, para su deleite, realizaron un generoso recorrido durante el fin de semana de la Hispanidad.
El viernes noche, daba el pistoletazo de salida al Ribersidecars Fest el bar “El Capote de Mario” ofreciendo una cena-pinchoteo.
El sábado por la mañana, los participantes se citaron en el parquin de la feria de muestras de Valladolid.
Para empezar bien el día, tomaron un buen desayuno y posteriormente, dio comienzo la ruta que les llevaría a pasar por los pueblos de Overuela, Puente Duero y Simancas.
Tras esto, retomaron fuerzas en el chiringuito “La excusa” con una exquisita tapa de paella y algo de beber. Después, en el restaurante “El Barrio” de Simancas, los moteros disfrutaron de una agradable comida, sorteo y regalos para todos los asistentes.
Por la tarde, los sidecares rodaron por el casco histórico de Valladolid donde, a su paso, no dejaron a nadie indiferente.
Al atardecer y con los motores ya apagados, pilotos y acompañantes pudieron bailar y cantar en el concierto al aire libre de Tribrutos, en el pub “Shutton Ginger Club”.
Al caer la noche y aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, navegaron por sus aguas a bordo del barco “La leyenda del Pisuerga” donde se sirvió la cena.
El domingo, los sidecareros arrancaron motores camino a Cigales pasando por Zaratán, Villanubla, Fuensaldaña y Mucientes. Una vez en Cigales, visitaron una bodega del siglo XVI, conocieron su historia, degustaron varios tipos de vino de la zona y allí dieron por finalizado este festival del motor.
Por último, queremos agradecer a todos los organizadores y patrocinadores del este evento, porque sin ellos no hubiera sido posible, ¡Gracias! Mención especial para José y Maite.
Rober y Marta, El sidecar de Pino.