IV Concentración Clásicos Paredes de Nava
Organizada por el club local Amigos de Los Clásicos Paredes de Nava, en colaboración con el ayuntamiento y pequeñas empresas locales aportando su patrocinio, logran realizar una de las concentraciones más numerosas de castilla y león, año tras año sigue sumando adeptos y cada vez desde más lejos.
Siendo una de las primeras concentraciones de vehículos clásicos del año, siempre se organiza en el mes de enero entorno al día 20 de enero, fiesta local en honor a San Sebastián, acompañados de un clima de invierno que no logra echar atrás a ningún participante.
La jornada estaba marcada para que un año más los clásicos engalanaran la plaza de España de esta localidad palentina con el rugir de estos motores y el típico olor a gasolina que impregna la pasión que hay por estas tierras a los coches clásicos, puesto que en estos pequeños municipios resisten este tipo de vehículos que aún son utilitarios.
La clásica invernal se desarrolla desde primeras horas con la invitación a los participantes y curiosos a un chocolate acompañado de orujo típico de estas tierras que ayuda mucho a sobrellevar el frio que hace en el mes de enero y más a primeras horas de la mañana. Las inscripciones comienzan con la entrega de la tradicional matricula con el nuero de dorsal y los regalos realizados por la organización a todos los participantes.
En torno al mediodía, la concentración hizo su ruta particular, que este año fue hasta la Ermita de Carrejas, un oasis en medio tierra de campos, disfrutando allí de un almuerzo que consistió en un caliente caldo casero y un chorizo realizado en la zona para sobrellevar la fría mañana.
En la concentración se dan cita numerosos clubs tanto de la región de Castilla y León como de otras comunidades autónomas, teniendo sitio también para participantes a nivel particular que este año han llegado incluso desde Mallorca -una pareja de jóvenes que ganaron claramente un merecido premio al choche llegado desde más lejos-.
Entre los demás participantes, caben destacar modelos exclusivos como un Datsun 260Z de 1976 que compitió en la pasada edición del Rally de Portugal de históricos y que veremos compitiendo en algún rally de clásicos nacionales este mismo año, Renault Alpine del año 72 ó modelos míticos como puede ser Delta HF Integrale totalmente de serie y el aire brutal y americano con el que siempre nos deleitan los Ford Mustang.
Para concluir el evento, se realizan diversas actividades mientras los coches quedan expuestos en la plaza, teniendo lugar allí mismo la apertura de un parque infantil con diversas atracciones, concierto y entrega de premios para los participantes. Así finalizamos el evento con una comida de hermandad para todos los participantes donde reina el compañerismo y el buen rollo.
Fotos: Sol
Texto: Clemente Hurtado